Una red paneuropea podría ser la clave de la energía limpia para Europa

agosto 1, 2008
energia limpia en europa

energia limpia en europa

Una red paneuropea de distribución de energía eléctrica podría ser la clave para que Europa pueda finalmente dejar atrás las fuentes no renovables de energía.

Una de las razones por las que la energía proveniente de fuentes renovables no junta más adeptos entre quienes tienen el poder de tomar decisiones es que el clima es poco predecible y no puede un país depender de que el viento sople o el sol brille para contar con suficiente energía para el suministro eléctrico. Por eso un grupo de científicos trabajó sobre esta problemática y propuso una interesante solución en el Foro Abierto de la Eurocienca en Barcelona (ESOF 2008).

La propuesta de los científicos tiene 2 pilares. Por un lado el clima: el sol siempre brillará en algún lugar y el viento siempre sopla en algún lugar. Por lo tanto sugirieron ubicar las fuentes de producción de energía en lugares donde el clima es estable y extremo. Por ejemplo sugirieron ubicar en distintos puntos del Sahara, donde el sol brilla casi todo el año y con mayor intensidad que en Europa, granjas solares que trabajen con celulas photovoltaicas o que captueren la energía solar térmica para hacer funcionar turbinas hirviendo agua. Calcularon que con capturar solo el 0,3% de la energía solar que cae en el Sahara y los desiertos del Medio Oriente se podría generar suficiente electricidad para toda Europa.

El segundo pilar de su propuesta consiste en armar una red de distribución paneuropea con cables de corriente directa (DC) que son más eficientes que los de corriente alterna (AC) y que solo sirven para transportar energía en largas distancias. Esta red distribuiría la energía generada en el norte de Africa por toda Europa y permitiría que se sumen los excesos de producción de energía otras fuentes renovables como la eólica que podrían vender el Reino Unido y Dinamarca o la geotérmica que podría vender Islandia. Con esta red los paises ya no estarían a la merced de que el clima sea favorable para generar energía y la poca previsibilidad climática dejaría de ser un factor de peso.

La propuesta de una red de distribución paneuropea ya cuenta con el apoyo del Presidente Francés Nicolás Sarkozy y el Primer Ministro Británico Gordon Brown. Los científicos admiten que la propuesta es ambiciosa y costosa, pero calculan que de ponerse en marcha el plan con una inversión de €450bn para el año 2050 ya se podrían producir 100GW de energía limpia. También calcularon que la gran escala y alta eficiencia del proyecto haría bajar los costos de la energía solar pudiendo mantener el precio que los usuarios pagan hoy.